Desde la ciudad y en el paseo del Espolón la vista de la vega toresana es espectacular. En días soleados es posible divisar hasta pueblos lejanos a más de 20 kilómetros de distancia. Desde el paseo que deja ver el Duero a espaldas de la Colegiata, una vista en lontananza da al visitante una oportunidad de relajar pensamientos y dejarse llevar por la lejanía y la tranqulidad.

Paseo Mirador del Espolón

Este paseo y mirador es un excelente balcón desde el que hay unas magníficas vistas del río Duero y de toda la vega, así como del Puente Mayor. De reciente construcción (año 2008) fue diseñado por los arquitectos Ángel Casaseca y Claudio Pedrero. El paseo recorre, a lo largo de rampas y pequeños tramos de escaleras, por el borde de la atalaya sobre la que está situada la ciudad y sobre las barranqueras. el paseo-mirador sirve de unión entre los dos edificios más importantes de la ciudad: La Colegiata Santa María la Mayor y el Alcázar también recientemente reformado y sede de punto de información turística.

Plaza de la Magdalena

Entre la Iglesia de San Salvador de los Caballeros y el Monasterio de Santa Sofía se halla la Plaza de la Magdalena, existe un mirador desde donde hay una vista espectacular. El paisaje. Desde esta plaza siguiendo la Calle del Canto se llega al Monasterio del Sancti Spiritus y a la Ermita de la Virgen del Canto (patrona de la ciudad).